
¿Impactan las nuevas tecnologías, los dispositivos móviles, en el living de una casa? Al parecer sí, y de una forma impensada de acuerdo con el informe "Residencial Energy Consumption Survey" impulsado por la Administración de Energía de EEUU.
Desde el último estudio realizado en 2009, el número promedio de televisores utilizados en los hogares estadounidenses ha disminuido de 2,6 por hogar a 2,3. El número de hogares que utilizaron tres o más televisores disminuyó de 44 por ciento a 39 por ciento en ese lapso de tiempo, y más hogares (2,6 por ciento) dicen que no están usando una televisión en absoluto. Esta es la primera vez en los casi 20 años de la encuesta que el número fue más del 1,3 por ciento.
Uno de los hallazgos clave en el informe es cómo el uso de energía de los dispositivos electrónicos varía según la edad. Se descubrió que los hogares más jóvenes tienen una menor concentración de televisores por persona y una mayor concentración de dispositivos portátiles, como ordenadores portátiles o teléfonos inteligentes. Televisores y periféricos de televisión como cajas de cable, grabadoras de vídeo digital y consolas de videojuegos siguen siendo los más utilizados, pero EIA ha revisado sus preguntas para esta encuesta para incluir la nueva tecnología como tabletas.
El medio CNET apuntó que no se está apagando la televisión ni dejará de ser un producto para las masas. Simplemente la gente está prefiriendo las pantallas más pequeñas.



